El autoconocimiento es la posibilidad de conocerse a sí
mismo. Esta posibilidad del conocimiento propio nos permite saber
cuáles son nuestros recursos, nuestro potencial y también
nuestras limitaciones.
¿Y por qué es importante ver esto del
autoconocimiento como una necesidad?
Porque lo que nosotros somos eso proyectamos. Si estamos confusos,
inquietos, si somos ambiciosos, inseguros, crueles o miedosos, eso
es exactamente lo que produciremos o crearemos en el afuera, en
el mundo y, también, con eso nos vamos a encontrar.
“Hombre conócete a ti mismo y conocerás al
Universo” se lee en la entrada al templo de Delfos de los
antiguos griegos. Ellos ya sabían que la clave para nuestra
evolución y crecimiento personal es el conocerse a sí
mismo.
Sin embargo, en la actualidad no parecemos darnos cuenta de lo esencial que resulta para el pensamiento y la acción que exista una comprensión fundamental de uno mismo, no sólo de las capas superficiales de la propia conciencia sino también de las capas más profundas de lo inconciente, de la totalidad del propio proceso de pensar y de sentir, pues de eso depende nuestro accionar y nuestra construcción de la realidad.
Creemos que nos conocemos bien pero en realidad no es así.
Nuestra mente está condicionada por nuestra cultura, nuestra
historia familiar, nuestro conocimiento y la acumulación
de nuestra experiencia. Por otra parte, juzgamos esta comprensión de nosotros mismos
como una tarea tan difícil que preferimos huir de ella hacia
toda suerte de actividades que nos distraen o que nos dan una sensación
de pertenencia tranquilizadora: ceremonias, organizaciones religiosas,
agrupaciones políticas, etc. todo antes que estudiarnos y
comprendernos integral y completamente.
La comprensión de uno mismo es de instante en instante. No se logra de una vez y para siempre sino que es una continua aventura, una tarea de descubrimiento
No hay un método ni un sistema para el autoconociemiento. Sin embargo, son de gran ayudan la psicoterapia, la astrología y los talleres vivenciales o talleres gestálticos que permiten un darse cuenta de nuestros condicionamientos y bloqueos.
La clave que surge del trabajo de autoconocimiento es la autoobservación : a partir de estar enteros en el aquí y el ahora, atentos a nuestro pensar y a nuestro sentir podemos ser más concientes y crear una realidad mejor para nosotros mismos.
La comprensión de uno mismo es de instante en instante. No se logra de una vez y para siempre sino que es una continua aventura, una tarea de descubrimiento
No hay un método ni un sistema para el autoconociemiento. Sin embargo, son de gran ayudan la psicoterapia, la astrología y los talleres vivenciales o talleres gestálticos que permiten un darse cuenta de nuestros condicionamientos y bloqueos.
La clave que surge del trabajo de autoconocimiento es la autoobservación : a partir de estar enteros en el aquí y el ahora, atentos a nuestro pensar y a nuestro sentir podemos ser más concientes y crear una realidad mejor para nosotros mismos.
¡Animate la experiencia del Autoconocimiento!
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