MARIANA CAPLAN - PROYECCIÓN - PURIFICACIÓN PSICOLÓGICA en LA ILUMINACIÓN

Las personas vienen a un maestro y no creen en ellas mismas, pero el maestro cree en algo de ellas. El maestro ve un potencial en ellas que todavía no han actualizado. Ni siquiera saben que existe, o lo perciben muy débilmente. El maestro mantiene esta proyección del yo superior por el discípulo.
El maestro cree en ellos más de lo que ellos creen en sí mismos. Y así es como debería ser. Lo que importa es que llega un momento en que el maestro tiene que devolver esa proyección. El discípulo tiene que ser remitido de nuevo a sí mismo, para que se responsabilice de su propia sabiduría interior.
Lo importante en este punto es que el maestro no tenga ni el más mínimo interés en mantener la proyección, en ser esta maravillosa persona para el discípulo. Ha de ser capaz de cortarla en el momento justo.


(...)

Jack Kornfield explica la necesidad que tiene el estudiante espiritual de liberarse de los bloqueos psicológicos y emocionales fundamentales:
"Si no hemos completado las tareas básicas para el desarrollo de nuestras vidas emocionales o somos todavía muy inconscientes respecto a nuestros padres o familias, nos daremos cuenta de que somos incapaces de profundizar en nuestra práctica espiritual. Sin ocuparnos de esos problemas, no seremos capaces de concentrarnos durante la meditación o seremos incapaces de aplicar en nuestra relación con los otros lo que descubrimos en meditación."
Aunque muchos lo han intentado, la purificación no puede escamotearse.
Si uno tropieza con algo que pueda llamarse, en un sentido lato, "iluminación", sin haberse purificado suficientemente, está destinado a encontrar dificultades continuamente en la vida espiritual...
(...)

La purificación psicológica suele ser el aspecto más habitualmente olvidado del proceso de purificación entre quienes presumen prematuramente de estar iluminados. Estos individuos están dispuestos a emprender austeridades y privaciones, sensaciones corporales intensas, visiones y fiebres —cosas que pueden ser síntomas de una purificación avanzada o no—. Sin embargo, frecuentemente no se hallan dispuestos a abordar el nivel más básico de purificación, que implica la eliminación de las capas más externas de su autonegación y el hacer frente a esos aspectos de sí mismos, inconscientes, que inhiben la claridad de percepción necesaria para su progreso espiritual.

Una debida purificación en el sendero espiritual (particularmente de los niveles "inferiores" de las tendencias psicológicas) reduce considerablemente la posibilidad de percibir erróneamente la propia iluminación y aumenta la probabilidad de estar adecuadamente equipado para manejar su iluminación de manera responsable cuando surja.

No podemos ser útiles a Dios o a la Verdad a menos que comprendamos la condición humana, y el modo de conocer la condición humana no es investigando nuestros cuerpos astrales y nuestras vidas anteriores, sino aprendiendo nuestro propio funcionamiento psicológico mecánico.



Mariana Caplan - Con los ojos abiertos


Y esto, como puede corroborar la mayoría de quienes trabajan conmigo... es el tronco de mi trabajo como facilitador.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Gracias por participar en esta página.